viernes, diciembre 21, 2007

Nunca sabés cuándo estás creando un recuerdo


Hace un par de años estaba en el centro de la ciudad y necesitaba sacar unas fotocopias. La fotocopiadora de la biblioteca universitaria estaba rota, así que caminé hasta terminar en una despensa/librería/mercería/telefónica que quedaba bastante lejos. Recuerdo que tenía toldo y rejas verdes, también recuerdo a la chica que atendía. Era bajita, morocha, tenía el pelo lacio corto. Cuando llegué buscaba una bobina de hilo (creo que verde) para otra clienta y tuve que esperar. Al llegar mi turno preguntó que necesitaba y le dí el libro. Mientras sacaba las fotocopias se puso a cantar una canción de Joaquín Sabina que estaban pasando en la radio, fueron 20 segundos pero hace años que los recuerdo.




Todos creamos y acumulamos recuerdos. A la larga uno aprende a vivir con los malos y atesora los buenos (aunque sean chiquitos como este). Según mi amiga Paula (que tiene un arsenal de buenas canciones y frases, como la que titula este post) en los recuerdos tengo algo lindo a lo que volver cuando me siento mal. Estoy muy de acuerdo. Otra persona me dijo que el que para sentirse bien se refugia en recuerdos poco a poco deja de vivir y empieza a sobrevivir. También hay bastante de cierto en eso. Entonces... qué tiene que hacer uno cuando el mundo no le facilita la felicidad? Llevarse al mundo por delante? Crear nuevos recuerdos?
Todo es muy complicado...


Nota: Cuando pasé por la despensa/librería/mercería/telefónica para sacar la foto no me animé a entrar (sí, soy un cobarde). Si alguien que esté leyendo esto tiene ganas de ir (queda por la calle San Lorenzo, entre Constitución y 25 de Mayo Tandil, Buenos Aires, Argentina) y fijarse si la chica sigue trabajando ahí se lo voy a agradecer.

6 comentarios:

Naty dijo...

Hola, Abel!

Te invito a participar del click infantil

Saludos!

Natalia. dijo...

a mi me gusta recordar cosas aunqe a veces no lo haga..


me gusto "mientras escribo escucho" como pusiste eso?!


ademas enigma...!

buem

besos...

Anónimo dijo...

Bueno bueno... acá está la dueña del "arsenal" de frases que dijiste....jejeje vaya piropo!!!!
No pensé que a esta altura de la vida me iba a poner colorada....porque eso es lo que lograste, una emoción inmensa mezclada con unas mejillas (guauuu) coloradas de timidez
Gracias por tenerme en cuenta, gracias por guardarme en tu corazón. Es bueno saber que lo que tengo atesorado en el mío... tiene un recuerdo gemelo en otro lugar
te quiero mucho
Felicitaciones por este rinconcito en la web...está muy bueno
Besho
Pau

Anónimo dijo...

Soy tan cobarde como tú... de estar en tu lugar no volvería a esa tienda (ni para tomar la foto), pero de estar en Tandil, ya hubiera movido cielo y tierra, y hasta habría sido capaz de empujarte para que entraras =D

Ya ves... soy buena para dar ese último empujón cuando se trata de sueños de otros, pero cuando se trata de los míos, soy tontamente incapaz de mover un dedo... Además, no hay personas cerca que logren darme (efectivamente) ese "empujón". El por qué de todo esto, es un poco largo de explicar por aquí... pero creo que ya lo hemos conversado antes.

Un abrazo ;)

So dijo...

Antes que nada, quería agradecerte tu paso por mi blog Perdidos en el espacio.

Respecto a tu post.. pues hay varias cosas con las que me identifico.
En primer lugar Joaquín Sabina, nunca puedo evitar cantar sus canciones si las escucho porque me gustan mucho.

En relación a los recuerdos, pues no es bueno vivir de recuerdos, pero no es bueno borrarlos.
Lo interesante es poder utilizar esos recuerdos buenos para cuando hay momentos tristes o malos en la vida de uno, y los recuerdos sencillos tenerlos presentes para aquellos momentos en los que las cosas nos parecen tan complicadas.

Te dejo un beso y FELIZ NOCHEBUENA, Navidad y que Papá Noel te traiga un puñadito de coraje para entrar al local.

mechiz dijo...

Gracias por pasar por mi Blog ...

Debo decirte que me sorprendió mucho este post. Era justo lo que necesitaba leer. Gracias.

Feliz navidad.